Las carretillas con baterías de litio proporcionan múltiples ventajas: una alta densidad energética, una gran eficiencia, tienen una vida útil mucho mayor (en comparación con las baterías de plomo-acido). Pero, sobre todo, las carretillas y transpaletas eléctricas de litio proporcionan una solución flexible y rentable: la carga de oportunidad.
En empresas de gran tamaño, que manipulan una gran cantidad de forma diaria, con hasta dos y tres turnos de trabajo, la disponibilidad de las carretillas elevadoras es fundamental.
La carga de oportunidad permite realizar cargas parciales sin que afecte a la vida útil de la batería. De este modo puede cargar sus equipos en cualquier momento, incluso en periodos de tiempo reducidos, siempre que no estén en utilización.
Dado que durante la jornada laboral existen descansos regulares, este tiempo de inactividad se puede aprovechar para cargar las baterías. El hecho de poder incorporar este tipo de carga durante el turno elimina la necesidad de realizar cambios de baterías, a diferencia de las carretillas con baterías de plomo-ácido.
Además, las de litio no emiten gases contaminantes durante su carga por lo que no se necesita un espacio dedicado exclusivamente a ello, permitiendo acercar los puntos de carga a zonas estratégicas. Flexibilice el almacén y gane espacio.
Se suele recomendar colocar los puntos de carga en aquellas zonas donde los trabajadores suelen estacionar habitualmente sus carretillas. Por ejemplo, un lugar recurrente suele ser cerca del comedor.
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