Las carretillas elevadoras de acero inoxidable (principalmente transpaletas y apiladores) son muy comunes en la industria de la alimentación y farmacéutica, donde se requieren elevados requisitos de higiene y salubridad. Para garantizar una buena higiene en el lugar de trabajo, es necesario implementar medidas desde el principio, es decir, desde la producción y el transporte.

El acero inoxidable es una aleación principalmente de acero, cromo y níquel. Estos materiales unidos consiguen que la resistencia a la corrosión sea extremadamente alta. En el blog de hoy se explican algunos de las ventajas que ofrecen los quipos de manutención de acero inoxidable.

 

Alta resistencia

Gracias a su composición el acero inoxidable posee una alta resistencia a la corrosión atmosférica y la oxidación. Además, no cambia su estructura a bajas temperaturas y por lo tanto es ideal para las cámaras frigoríficas.

 

Higiénico

Debido a su composición, la baja rugosidad y su porosidad, los agentes externos como el polvo y las bacterias no se quedan adheridos a la superficie, por lo que es fácil de limpiar.

 

Durabilidad

El acero inoxidable es un material muy duradero por su capacidad para aguantar las condiciones físicas y químicas a las que está expuesto. Mientras el acero normal empieza a deteriorarse a los 15 a 20 años, el acero inoxidable puede llegar a superar los 60 años.

 

Sostenibilidad

Todos los aceros inoxidables son reciclables y resultan altamente rentables por sus cantidades de cromo y el níquel.

 

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